En 2018 se cumplirán 25 años del nacimiento de Prensávila, primer Centro Especial de Empleo de la provincia de Ávila. La primera actividad productiva fue la venta de prensa (de aquí el nombre) y desde entonces han sido varios los sectores donde hemos abierto huecos de mercado para crear puestos de trabajo para personas con discapacidad: venta de prensa, reparto a domicilio, encuadernación, recogida de papel y cartón y mantenimiento de jardines.
Fueron tiempos difíciles pero muy ilusionantes, para formar y que empezaran a trabajar personas con discapacidad que nunca antes lo habían hecho. Fue un gran desafío. Ver cómo avanzaban día a día y cómo realizaban su trabajo de una forma más que correcta supuso una gratificante inyección de moral.
Desde entonces hemos conseguido que varios de nuestros trabajadores se hayan incorporado a empresas ordinarias y que otros hayan alcanzado la jubilación, estamos orgullosos de ellos y nos da mucha confianza para seguir en el camino aunque estos últimos años han sido especialmente difíciles y hemos tenido varios ERES.
Afortunadamente en 2017 hemos conseguido mantener los puestos de trabajo e incluso en verano aumentar la plantilla, tanto en jardinería como en otros campos gracias a la colaboración con otras empresas (URBASER). Hemos desarrollado acciones formativas encaminadas al conocimiento del arbolado urbano dirigidas a alumnado de primaria y secundaria, realizadas en colaboración con el Observatorio Activo Avila 1131. Hemos continuado realizando las habituales campañas de Santos (arreglos florales) y seguimos colaborando con importantes empresas abulenses (Mapfre, Yemas de Santa Teresa), y poco a poco vemos cómo se va afianzando el sector de recogida de residuos textiles.
Nuestro mayor deseo para el 2018 es poder continuar con nuestro trabajo, consolidar y crear nuevos puestos para personas con discapacidad.
Queremos dar las gracias a todas las personas e instituciones que nos ayudan a conseguirlo día a día. Ellas son una parte muy importante de nuestro proyecto, con sus aportaciones que pueden ir desde traer su bolsa de ropa, encargarnos un ramo de flores o comprar sus árboles en nuestro vivero de Laldea.
A todas las gentes de Ávila pero especialmente a aquellas personas que de una forma u otra han sido parte activa de este proyecto tan enriquecedor les deseamos lo mejor, y que si no se cumplen todos sus sueños, la luz siga alumbrado el camino correcto para lograrlos.